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Conexión y educación en las villas: el GCBA deberá garantizar ambos derechos

Un amparo judicial ordenó al gobierno de la Ciudad de Buenos Aires a garantizar el acceso a internet y a entregar dispositivos que posibiliten la educación a distancia en sectores vulnerables. La medida cautelar dictada el día 8 de junio por el Juez porteño Andrés Gallardo le dio la razón a la acción de amparo colectivo presentada por distintas organizaciones sociales. Jonatan Baldiviezo, director del Observatorio del Derecho, en diálogo con Barricada TV, brindó más precisiones sobre esta medida.

A casi tres meses del comienzo del aislamiento social, preventivo y obligatorio, las clases virtuales fueron una de las formas de continuar con las actividades educativas, pero en no pocos sectores esta posibilidad es impracticable. «Sin internet ni computadoras no hay educación a distancia», fue una de las frases que formaron parte de la campaña que llevaron adelante desde el Observatorio del Derecho a la Ciudad. Bajo esta premisa, el acceso a internet reviste carácter de derecho humano.

«A partir de ahora tiene que ser automática la entrega de estas computadoras sin tantas restricciones», dijo Baldiviezo. Es que los requisitos para acceder a una netbook en comodato son muy difíciles de cumplir para muchas familias, como por ejemplo que ningún otro miembro de un grupo familiar tenga una computadora. Baldiviezo remarcó, además, que es importante acelerar estos procesos de entrega ya que debe mantenerse la «continuidad pedagógica». Pero de nada serviría la distribución de dispositivos sin una posibilidad de conectividad en las villas, y en este sentido, tal punto está contemplado en la cautelar, dado que se ordena al GCBA a proveer de equipos de conectividad inalámbricos con fines comunitarios, como los que están en algunas plazas, en lugares donde la brecha digital sea importante.

La medida cautelar tuvo lugar por orden del Titular de Juzgado N°2 en lo Contencioso, Administrativo y Tributario de la Ciudad, Juez Roberto Andrés Gallardo, y dispone de un máximo de cinco días desde el 8 de junio para que el GCBA haga efectivas las respuestas. Además del ODC, las otras organizaciones que participaron del reclamo fueron la Cátedra Libre de Ingeniería Comunitaria, el Instituto de Pensamiento y Políticas Públicas, el Frente Territorial Salvador Herrera, la Unión de Trabajadores de la Educación y la ACIJ.

Entre los puntos principales del amparo, en primer lugar, se insta al GCBA a suspender la aplicación de los requisitos para acceder a una netbook, además de la exigencia de una entrega más ágil. También se entenderá automáticamente como una situación de vulnerabilidad la residencia del grupo familiar en una villa o el cobro de algún plan social o subsidio del Estado. Por otra parte, el registro de solicitantes deberá ser más ágil y de verificarse una demanda que supere las posibilidades del stock de dispositivos, deberá presentarse un plan concreto para mejorar esa situación, como puede ser la entrega de tablets. Una vía de solución en escenarios donde no pueda brindarse conectividad en algún barrio, es la entrega de dispositivos móviles como celulares con datos ilimitados para que los alumnos puedan compartir la señal de internet a sus equipos domésticos. «Esta medida era extremadamente necesaria en la ciudad de Buenos Aires», concluyó Baldiviezo.

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